Como medio acreditado queremos dar nuestra visión de lo acontecido el pasado viernes 11 de julio en la Feria de Muestras de Zaragoza. A las 12 del mediodía se abrían las puertas y los locales Miss Diciembre daban el pistoletazo de salida al Monsters of Rock 2008. Por cuestiones laborales no pudimos ver los primeros grupos hasta Pretty Maids que ayudado por la inencontrable ubicación de la caseta de acreditaciones sólo disfrutamos de los últimos acordes de su actuación. Gustaron. Anteriormente Rage y Candlemass habían certificado su paso por el Monsters donde pudimos recoger todo tipo de impresiones. “Lo bueno comienza ahora” era lo que se oía entre el público asistente que intentaba buscar la sombra o refrescarse ante las altas temperaturas que allí se vivían. Todo parecía indicar que iba a ser una jornada de éxito para el hard-rock más clásico, pero no adelantemos acontecimientos. A las 18:45 horas hacían acto de presencia los miembros de la mítica banda irlandesa Thin Lizzy. Scott Gorham y John Sykes, dos de los guitarristas que formaron parte de Thin Lizzy, el primero desde los 70 y el segundo ya en los 80, devolvían a la vida a un grupo que no hubiera sido lo que fue sin el tristemente fallecido Phil Lynnot en 1986. Pero eso es historia y lo que queríamos era volver a escuchar esas grandes canciones de la mano de sus guitarras. No podía ser otra, “Jailbreak” daba comienzo a su actuación y enseguida el público se trasladó a otra década. Continuaron con “Waiting for an Alibi” de la época del “Black Rose”, sonaron clásicos de los 70 como “Don’t Believe a Word”, “Are You Ready”, y la versión del clásico de Bob Seger “Rosalie” con el recuerdo a Phil Lynnot. Uno de los momentos álgidos del show desde luego, para posteriormente darle protagonismo a Tommy Aldridge que se encargaba de demostrar lo bueno que es con las baquetas y las manos. Prescindible. Lo que queríamos era escuchar más canciones como “Suicide”, “Sha-la-la”, “Cowboy Song” y la esperada “The Boys Are Back In Town”. John Sykes se explayó a gusto interpretando “Cold Sweat” de su época en Thin Lizzy. El público quería más y la banda se despidió con la tradicional “Roisin Dubh: Black Rose”. En fin, una actuación muy digna aunque con mal sonido, en la que un servidor quizá echó en falta “The Rocker”, aunque ya sabemos que para gustos...
El cielo comienza a cubrirse de nubes pero la temperatura seguía siendo muy alta. Saciamos nuestra sed con cerveza y nos damos una vuelta por los chiringos. Allí estaban Pretty Maids firmando discos y dejándose fotografiar con los fans. Comentarios sobre lo visto hasta entonces en el festival con los muchos rockeros allí congregados y vuelta al ruedo para tomar posiciones delanteras porque venía el tío Ted con la recortada. La expectación era máxima puesto que no sólo de buenas canciones es conocido el Sr. Nugent sino también de su ferviente apoyo a la NRA (Asociación nacional del Rifle) y sus posiciones ultra-patriotas al margen de publicaciones de libros como “Dios, armas y rock and roll”. Es triste que esta mala prensa persiga a Ted Nugent, porque es un lujo tener a un auténtico superviviente de la escena de Detroit todavía en activo desde finales de los 60 con los psicodélicos Amboy Dukes y posteriormente con su exitosa carrera en solitario durante los setenta. Pero aquí a qué hemos venido? Pasadas las 20:15 horas, hacía acto de presencia el loco de Detroit, señoras y señores Ted Nugent!!! Con una enorme bandera estadounidense de fondo se presentó Ted Nugent en formato trío. Sonaban los primeros acordes de “Wango Tango” de su “Scream Dream” (1980) y comenzaba la fiesta. No podía continuar con un tema mejor “Storm Troopin’” de su debut en solitario en 1975. Y si su intención era tocarme la fibra sensible, lo consiguió interpretando “Free for All” de su álbum del mismo nombre en 1976. Cayeron temas de su época de los 80 y más reciente. Pero todos esperábamos uno de sus himnos “Cat Scratch Fever” de 1977. Un lujazo poder disfrutar del “hombre de las cavernas” en Zaragoza. Pude observar que en las primeras filas había fans de toda su carrera puesto que uno de ellos le mostraba a Ted las portadas de todos sus discos, incluyendo a Damn Yankees. Anécdotas a parte, lo que me preocupaba en esos momentos era el empeoramiento del tiempo con fuertes rachas de viento que obligó a los montadores a retirar las dos pantallas visuales. Ted Nugent se retiró del escenario con lo que imaginábamos que sería su despedida, pero no se vayan todavía, de repente apareció ataviado con unas plumas indias en la cabeza ante el delirio de los fans y se despidió regalándonos “Great White Buffalo” de sus Amboy Dukes con su flamante Gibson blanca. Quizás se echó de menos una guitarra más que le acompañara durante sus solos. Un auténtico show de hard-rock setentero a cargo de uno de sus mayores representantes. Inolvidable.
Momentos después se anunciaba la firma de discos de Twisted Sister y allí nos fuimos. “Llegará, llegará, la tormenta llegará”, cantaba Amaral a Bob Dylan, pues si ese día no llegó el viernes vaya si lo hizo. Comenzó el diluvio en Zaragoza y las carreras por encontrar un refugio donde resguardarse no paraban de sucederse, hubo algunos que lo hicieron hasta en los baños habilitados. La lluvia acompañada por un fuerte vendaval hizo caer una parte de la torre de sonido golpeando a uno de los asistentes. Gracias a la rápida asistencia de la Cruz Roja pudo ser atendido. El desconcierto reinaba en la Feria de Muestras acerca del futuro del festival. Allí nadie sabía nada, en la zona de prensa todos nos preguntábamos si alguien sabía algo. Poco a poco comenzaba a retirarse el equipo del escenario.Todos nos temíamos lo peor y pasadas las 23 horas se anunciaba la suspensión del Monsters of Rock ante la desilusión de los allí congregados. Nos quedábamos sin ver a Deep Purple otra vez, Twisted Sister y Saxon.
Todos nos fuimos a casa tristes con la esperanza de que el Metal Way se celebrara al día siguiente sin problemas. A las 11:15 horas del sábado, la organización envió un comunicado oficial a todos los medios anunciando la suspensión también de la jornada de conciertos prevista para el sábado, obligados por los graves daños provocados por la intensa tormenta y consideró que la seguridad del público y de los artistas programados debía primar sobre cualquier otra consideración.
Una pena. Ahora sólo nos queda confiar en que esta cita con el hard-rock y el heavy-metal se siga celebrando en Zaragoza.
El cielo comienza a cubrirse de nubes pero la temperatura seguía siendo muy alta. Saciamos nuestra sed con cerveza y nos damos una vuelta por los chiringos. Allí estaban Pretty Maids firmando discos y dejándose fotografiar con los fans. Comentarios sobre lo visto hasta entonces en el festival con los muchos rockeros allí congregados y vuelta al ruedo para tomar posiciones delanteras porque venía el tío Ted con la recortada. La expectación era máxima puesto que no sólo de buenas canciones es conocido el Sr. Nugent sino también de su ferviente apoyo a la NRA (Asociación nacional del Rifle) y sus posiciones ultra-patriotas al margen de publicaciones de libros como “Dios, armas y rock and roll”. Es triste que esta mala prensa persiga a Ted Nugent, porque es un lujo tener a un auténtico superviviente de la escena de Detroit todavía en activo desde finales de los 60 con los psicodélicos Amboy Dukes y posteriormente con su exitosa carrera en solitario durante los setenta. Pero aquí a qué hemos venido? Pasadas las 20:15 horas, hacía acto de presencia el loco de Detroit, señoras y señores Ted Nugent!!! Con una enorme bandera estadounidense de fondo se presentó Ted Nugent en formato trío. Sonaban los primeros acordes de “Wango Tango” de su “Scream Dream” (1980) y comenzaba la fiesta. No podía continuar con un tema mejor “Storm Troopin’” de su debut en solitario en 1975. Y si su intención era tocarme la fibra sensible, lo consiguió interpretando “Free for All” de su álbum del mismo nombre en 1976. Cayeron temas de su época de los 80 y más reciente. Pero todos esperábamos uno de sus himnos “Cat Scratch Fever” de 1977. Un lujazo poder disfrutar del “hombre de las cavernas” en Zaragoza. Pude observar que en las primeras filas había fans de toda su carrera puesto que uno de ellos le mostraba a Ted las portadas de todos sus discos, incluyendo a Damn Yankees. Anécdotas a parte, lo que me preocupaba en esos momentos era el empeoramiento del tiempo con fuertes rachas de viento que obligó a los montadores a retirar las dos pantallas visuales. Ted Nugent se retiró del escenario con lo que imaginábamos que sería su despedida, pero no se vayan todavía, de repente apareció ataviado con unas plumas indias en la cabeza ante el delirio de los fans y se despidió regalándonos “Great White Buffalo” de sus Amboy Dukes con su flamante Gibson blanca. Quizás se echó de menos una guitarra más que le acompañara durante sus solos. Un auténtico show de hard-rock setentero a cargo de uno de sus mayores representantes. Inolvidable.
Momentos después se anunciaba la firma de discos de Twisted Sister y allí nos fuimos. “Llegará, llegará, la tormenta llegará”, cantaba Amaral a Bob Dylan, pues si ese día no llegó el viernes vaya si lo hizo. Comenzó el diluvio en Zaragoza y las carreras por encontrar un refugio donde resguardarse no paraban de sucederse, hubo algunos que lo hicieron hasta en los baños habilitados. La lluvia acompañada por un fuerte vendaval hizo caer una parte de la torre de sonido golpeando a uno de los asistentes. Gracias a la rápida asistencia de la Cruz Roja pudo ser atendido. El desconcierto reinaba en la Feria de Muestras acerca del futuro del festival. Allí nadie sabía nada, en la zona de prensa todos nos preguntábamos si alguien sabía algo. Poco a poco comenzaba a retirarse el equipo del escenario.Todos nos temíamos lo peor y pasadas las 23 horas se anunciaba la suspensión del Monsters of Rock ante la desilusión de los allí congregados. Nos quedábamos sin ver a Deep Purple otra vez, Twisted Sister y Saxon.
Todos nos fuimos a casa tristes con la esperanza de que el Metal Way se celebrara al día siguiente sin problemas. A las 11:15 horas del sábado, la organización envió un comunicado oficial a todos los medios anunciando la suspensión también de la jornada de conciertos prevista para el sábado, obligados por los graves daños provocados por la intensa tormenta y consideró que la seguridad del público y de los artistas programados debía primar sobre cualquier otra consideración.
Una pena. Ahora sólo nos queda confiar en que esta cita con el hard-rock y el heavy-metal se siga celebrando en Zaragoza.
2 comentarios:
Como viene en el articulo, una autentica decepcion para muchos de los que nos trasladamos alli. Esperemos que por este cumulo de circunstancias negativas que se dieron no dejemos de poder disfrutar de un festival de estas caracteristicas, con el que Zaragoza estaba adquiriendo ya cierto renombre en la escena rockera. Esto es para mi lo mas preocupante.
me has plagiado el articulo! ni que lo hubiesemos vivido juntos! jajajaja es broma
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